Casino "Haengbok"

Esa mañana estaban sacando los últimos borrachos del casino cuando recibí una... grata noticia. Mi abuelo acababa de bajar de un coche negro, se apoyaba en un bastón y tenía rostro serio. Se acercó a mi y me entregó un sobre rojo donde ponía en letras grandes Tri-Angle.
- ¿Qué es esto? - Le pregunté.
- Tu instituto...
- ¿Y la universidad? Este es mi último año, me graduo...
- Olvidate de esa universidad... ya estás graduado desde hace tiempo... eres el mejor SeungRi - Aquello me hizo sentir genial - Aquí te prepararán para lo que estás a punto de heredar...
- Perfecto - Acepté el sobre y entré al casino seguido de mi abuelo - Por cierto, el dinero ganado está sobre tu despacho, abuelo.
- Sabía que podía confiar en ti, SeungRi... - Entró a su despacho y yo me hinché de orgullo.
Leí detenidamente todo los papeles y me pareció interesante... Mafias de Japón, China... Corea. Sería interesante conocer mejor al enemigo... Treguas y qué narices, solo uno puede tener el poder... y ese sería yo.
- Jefe...
- Dime - Alcé la cabeza.
- Tengo noticias de su casa... - Se acercó a mi y yo esperé a que dijera algo - Su hermano... JunKi... está vivo.
- ¿Qué? - Rápidamente me puse en pie y golpeé la mesa - ¿Cómo es posible?
- No sabemos nada... solo que ha vuelto a su casa.
- Ese insensato... - Fruncí el ceño y apreté el puño - Se va a dar contra un buen muro de hormigón.
Saló de allí rápidamente para dirigirme a la escuela a la que iría, quería conocer como era aquello... y más, quería encontrarme con mis compañeros y rivales.

Levante la mirada mientras jugueteaba con uno de los hielos del vaso con ron que le había pedido para luego mirarle, divertida.

- El mismo motivo que te mueve a ti, SeungRi... Tu abuelo te mando alli... ¿ me equivoco? -meti mi dedo en la boca probando el licor y sonreí mirando su cara. - El mio hizo lo mismo, y no lo veo mal... me gustaría comprobar que tan duros son los japoneses y los chinos... -sonreí más altivamente - ... y terminar de conocer a los aliados... -termine mirándole mientras tomaba un sorbo de aquello.

- Tienes razón - Asentí con la cabeza. Era una chica muy inteligente - Yo también pienso de la misma manera... - Suspiré y bebí del licor que tenía en el vaso con la vista puesta al frente - ¿Qué piensas con respecto a las mafias occidentales? - Tenía mucha curiosidad por saber qué pensaba la familia Hwang al respecto, así que la miré muy serio y pensativo.

Me recliné un poco más en el asiento y miré hacia el techo suspirando largamente. Me moví un poco sacando un cigarrillo de uno de los bolsillos del pantalón y lo encendí dandole una larga calada, mirándo luego a JunKi fijamente.

- El abuelo dice que solo son un estorbo.... pero -miré hacia un lateral sonriendo y volvi a mirarle- creo que podémos sacar provecho los coreanos de ellos.... -me lamí los labios lentamente, pensando en aquello - Pero no es algo que los viejos puedan hacer, SeungRi... ellos no tienen la mentalidad que manejamos los jóvenes...

- Si, eso ya lo sé... - Vi como daba largas caladas al cigarro y suspiré - De ahí a que estemos nosotros al cargo proximamente - Sonreí y me apoyé en la barra - Podemos jugar mucho usándolos... no hace mucho un barco de Italia atracó en Busan queriendo vender sus cosas aquí - Moví el vaso con las manos - ¿No es interesante? - Me quedé un momento en silencio - Ninguno de los que bajaron del barco consiguió lo que quería... - Suspiré pausada y tranquilamente.
La miré. No sé por qué se lo conté, aunque fijo que ya sabía algo... No había movimiento que hiciese uno sin que el otro lo supiera.